“Que muchas sean las mañanas de verano en que llegues -¡con qué placer y alegría!- a puertos nunca vistos antes.” En mi “viaje a Ítaca”, hoy alimento mis papilas gustativas con el fruto de la vid de las serpenteantes y empinadas colinas doradas en pleno Douro. ¡Bienvenid@s a Oporto!
