El viñedo francés, claramente jerarquizado y posicionado, es plural y diverso. Vinos frescos y afrutados, suaves y delicados, concentrados y tánicos, potentes y cálidos, especiados e intensos, … Toda una paleta organoléptica y sensorial para explorar y disfrutar.
Hoy viajamos hasta la perla gastronómica de España, recorreremos un paseo entre sus viñas que, coquetas, miran al mar. Al País Vasco, tierra de tradición pesquera, de navegantes, de industria y del txacoli.
Como en el prefacio del soliloquio shakesperiano, hoy no me cuestiono sobre ser, sino sobre pertenecer o no pertenecer, esa es la cuestión.
Treinta y ocho primaveras disfrutadas, esta última confinada, pero igual, atesorada con los cinco sentidos. Hoy escribo estas líneas con aún más ganas de seguir celebrando la vida, bebiendo buenos vinos con buena compañía.
“Vino de lejos un día. Sonó el timbre y, al abrir la puerta, estaba allí, hermosa como una ofrenda de los sueños.” Así como Fernando Aramburu empieza su relato “La Guapa”, así te puedes sentir cuando descubres el perfume sedoso, seductor e intenso de una buena copa de viognier.
Último jueves del mes de mayo y ya olfateamos las notas aromáticas de flores y frutas del periodo estival del año con deseos renovados y ganas de disfrutar del buen clima, aún en tiempos de coronavirus, así que acabemos el mes con dos clásicos al mejor estilo Vinálogos.
Parece un poco farragoso pensar pero el mundo del vino también tiene fraude. Con vinos de todos los días, pero también y muy en concreto con los vinos caros, piezas únicas – consideradas de coleccionador -.
Nos acercamos al ecuador de este particular año 2020 con el horizonte más claro y nos reconocemos en una “nueva realidad” -término ya recurrente- con la mirada puesta en los nuevos proyectos y en retomar los que súbitamente quedaron suspendidos. Hoy, el vino y la comunicación de este para hacerlo más nuestro.
Este domingo 3 de Mayo celebramos el Día de la Madre en España, nuevamente de manera atípica. Que no sea ese un motivo para dejar exaltar, un día más, ese maravilloso privilegio que es ser mamá.