Hace un día precioso, todo en su justa medida, el sol brillante y la brisa fresca, mientras la tarde asoma como ejercicio deleitoso para la vista y, ¿yo? Voy de camino a vivir un fin de semana improvisado pero perfecto.
Este fin de semana tuve la oportunidad de volver a visitar una de las DOP más representativas de viñedo español, la Ribera del Duero, cuna de algunos de los mejores vinos tintos españoles situados en la cima de calidad tanto del panorama nacional como internacional.