Quizás este título ya lleve al lector a cuestionar una serie de puntos. No lo puse tontamente. Además, yo misma me he preguntado varias veces acerca del llamado “vinos naturales”. La realidad es que, aunque ya vengo aceptando este nombre, no dejan de surgir en mi cabeza una serie de preguntas, que muchos de mis lectores a veces me dicen. ¿Hay algún vino que no sea natural? ¿Qué es el vino natural? ¿A qué me refiero con vinos fuera de la ley? Cierto es que, fue en un debate con mis amigos de la escuela de sommelieria acerca de este tema, que nos vino tal título. Polémico, disruptivo, hasta un poco a lo bruto.
Pero si he conseguido llamar vuestra atención ya vale. Este post no tiene desperdicio.
Hoy tocamos un tema de bastante controversia en el mundo del vino, pero no deja de ser un tema apasionante y también un debate interesante. Pero primero conviene resolver la probable paradoja:
Si hablo aquí de un vino natural, ¿es por qué existe un vino antinatural?
Elemental, mi querido Watson. La respuesta es “NO”. Cualquier vino que derive de una fermentación alcohólica de un mosto es un vino natural. Y es así como se hacen todos los vinos del mundo. Así que partimos de la primicia de que todos los vinos son naturales.
Ahora bien, ¿Qué es el vino natural, entonces?
Muy bien, el vino natural es designado así por sus viticultores y elaboradores porque son vinos que son elaborados con una mínima intervención del hombre y ciertos conocimientos de la naturaleza. Argumentan ellos, que el simple hecho de elaborar un vino no es un proceso natural, sino artificial, ya que del viñedo no saldrá con un vino hecho.
También, seamos sinceros, ni el viticultor de los diferentes tipos de vinos que hay en el mercado, ni el viticultor del llamado “vino natural”. Todos tendrán, tarde o temprano, la intervención del hombre. La pregunta del millón es ¿qué diferencia unos de otros?
¿Qué es un vino natural?
Para que quede claro entonces. Para todo este movimiento de viticultores, elaboradores y enólogos, los vinos naturales son aquellos que parten de un proceso natural, donde elaborar un vino consiste en una mínima intervención por parte de ellos en todos los procesos de la cadena de producción.
Como del viñedo no saldrás con el vino hecho, sino de todo un proceso en que intervienen miles de decisiones humanas, lo que aspiran estos viticultores es lograr que este vino proceda de la reducción máxima pero reflexionada de la intervención humana en el proceso de su elaboración.
¿A qué me refiero con un vino fuera de la ley?
Básicamente no hay un marco legal que regule que un vino sea o no sea “natural”. Así como el 99% de los procesos, nombres y designaciones del vino están legisladas, estos vinos se encuentran en un vacío legal. Hay gente que me dice que deberían estar dentro de la categoría de biológico, pero lo cierto es que vinos “naturales” y vinos “biológicos” son distintos. Pueden compartir ideologías en común, pero están lejos de llegar a ser lo mismo.
La agricultura ecológica se encuentra regulada a nivel europeo, por el Reglamento (CE) 848/2018 del Consejo sobre producción y etiquetado de los productos ecológicos.
Movimiento vinos naturales
Hoy en día, el movimiento de vinos naturales viene creciendo muchísimo, y en el mercado vínico hay muchos detractores. Cierto es que son vinos completamente distintos de lo que estamos acostumbrados a beber en el día a día. Pero no por ello, son peores. Son muy distintos, y a veces lo distinto nos cuesta asimilarlo. Que haya viticultores que se hayan preocupado de realizar un camino diferente en el mundo del vino, probando con formas de elaborar vinos como nuestros ancestrales, o intervenir lo mínimo posible, no deja de ser una historia interesante que nos trae otras lecturas y otros perfiles de vinos que probar. Ahora bien, hay que estar preparados para lo que viene. Te puede gustar o no, pero es importante tener la mente abierta. Si os contara mi experiencia con mi primer vino de jerez y lo que significa para mi el vino de jerez hoy, fliparías.
Vinalogando con los vinos naturales
Si queréis saber más acerca de este tema, os dejos dos sugerencias de lecturas: una teórica, otra práctica. Lectura teórica: el libro de Jean Gómez Pallarès, Vinos Naturales en España – Placer autentico y agricultura sostenible en la copa -. Este vino es todo un manifiesto acerca de qué es el vino natural, cuales son las bases que se ha sentado todo este movimiento, y cuál es la ideología detrás de ello. Además, al final del libro, Jean Gómez, hace un recorrido por varias bodegas en España que elaboran vinos naturales.
Lectura práctica: Bistró Cascorro – vinos naturales. Es un bar de vinos localizados en el barrio de la La Latina, Madrid, en que solo comercializa vinos naturales. Los dueños son franceses, y hacen un maridaje espectacular entre comida francesa y vino español. Como catar un vino, no deja de ser una lectura líquida, he querido dejar aquí, un deber de casa de lo más agradable. Leer exactamente qué es un vino natural probándolos.
¡Vinaloguemos!