Llevamos ya algunos meses juntos y el tiempo ha pasado volando. Parece que fue ayer cuando arranqué Vinálogos y mes tras mes hemos ido compartiendo esta querida afición que nos une a tantos. La idea ha salido del papel con lo que teníamos a mano. Cosas han quedado pendientes… el logo por ejemplo.
He iniciado esta página pensando mucho en las páginas de vinos que tenemos aquí, en España. Mi idea era poder hacer algo diferente, más cercano. Hablar a cualquier persona de forma desenfadada acerca de esta bebida que tanto nos fascina.
No sé si lo vengo logrando o no, pero lo cierto es que estoy intentando desarrollar posts molones, que enseñen que para beber vino no hay que ser serio y formal como Loquillo.
El nombre Vinálogos
Como os dije antes, y es uno de los matices principales de mi página, Vinálogos es un blog para los amantes del vino. Su palabra procede de la unión de las palabras vino + diálogos.
Cuando hablo de diálogos me refiero a tu diálogo con la copa, a tu diálogo con algún compi, o a los infinitos tipos de diálogos que podemos tener acerca de una copa de vino. El diálogo que tengo conmigo misma al llegar en casa, cuando decido servirme una copa (eso suena un poco borracho, ¡ya lo sé!), el diálogo que tengo en las quedadas de amigos, la botellas que descorchamos. Bueno, en fin… todo es motivo para Vinalogar.
Y, principalmente, Vinalogar sin tonterías. Porque el vino está hecho para pasar un buen rato. Para disfrutar y reír… para amenizar el fin de día o el final de la semana. Y por eso insisto tanto en el verbo Vinalogar.
Vinaloguemos todos los días… para que cada momento sea más ameno, para que cada día sea para disfrutar.

El logo
Confieso que tenía la intención de empezar este blog con el logo ya hecho. Fue más complicado de lo que pensaba. Las propuestas no me convencían y carecía de tiempo para currármelo a tope. También trabajo y dispongo de poco tiempo para dedicarme a la página. Pero bueno, aun así estoy viendo como el proyecto está saliendo del papel.
Estuve muchas semanas pensando qué logo representaría de forma sencilla la idea de Vinálogos. Creo que el clic me vino en una clase creativa que tuve hace unas dos semanas. La idea de dos copas hablando entre sí.
Y así fue cómo nació este logo. Un dibujo más jovial que representa el mensaje que quiero llevar con esta página.
Hoy empieza una nueva etapa en Vinálogos. Poco a poco vamos perfilando nuevas ideas y alcanzando los objetivos propuestos. Y espero estar poco a poco conquistando a mis lectores.
Estén seguros que no lo hago esta página con obligación, sino con mucha ilusión. Es un placer poder compartirla con vosotros. Si os apetece darme cualquier sugerencia, por favor escribidme sin miedo. Vosotros me ayudáis a construir todos los días Vinálogos.