Porque en nuestro post de la semana pasada se ha quedado corto, y en realidad que no podemos tampoco dejar de hacer mención al pequeño comercio, a aquella tienda de barrio, del amigo que tuvo que cerrar de la noche para el día para ayudar a poner fin a esta pandemia. Por ello no puedo dejar de rendir homenaje y de citar estos sitios, que acaban siendo tan útiles, pero también hacen con que las calles de la ciudad sean más humanas.
Imaginad una ciudad sin comercio. ¿Sin Paco, sin Pepito, sin Concha o Mari Pili? Qué triste seria deambular por un mercado en que ya no hay rostros conocidos, que no hay gente que nos traiga el mejor de sus productos pensando especialmente en nosotros. Por ello, demos valor a nuestro barrio, a nuestra ciudad… con el cambio de fase, lo primero a hacer es comprar justamente en la tienda de Pepito, de Paco, de Concha y la de Mari Pili. Hacer piña, y ayudar a aquellos que han remangádose durante este período para ayudar en esta crisis. A estos que han puestos sus bienes en riesgo, que han aguantado los puestos de trabajo, y que han sido responsables. Quizás ahora es el momento de dejar los grandes comercios y los grandes almacenes, y como forma de agradecimiento, ir a la tienda de ellos, hablar con ellos y hacerlos saber que no están solos.
Vinalogando con el pequeño comercio
En este cambio de fase propongo que vayamos a nuestros comercios locales y que hagamos piña. Por ello he seleccionado mis tiendas de vinos preferidas en mi Madrid para que, si os sirve de recomendación, echad un ojo en lo que tienen.
Divinity Wines
Imposible no citarla. No porque Verónica me ha enseñado todo lo que sé, pero también porque está ahí en todas las horas, en todos los momentos. Y además de este lado humano, no puedo dejar de decir que estáis en manos de una gran profesional, que selecciona los mejores vinos, y que te indica siempre lo mejor.
¿Queréis champagne? ¿Cava, fino, manzanilla, lo que sea? Habla con Verónica. Seguramente te indicará vinazos; te asesorará con maridaje, además de envolverte con las historias más bonitas acerca del vino.
Enoteca Barolo
Porque son mis vecinos, porque les quiero abierto por mucho mucho tiempo… y porque me encanta sus catas. Como el nombre ya dice, la enoteca Barolo está especializada en venta de vinos de la región de Barolo. ¿Significa que solo tiene esto? Para nada… su colección es amplia, y digna de ser vista.
Soy enamorada de la enoteca y, verdad sea dicha, la verdad es que voy menos que debería. Pero, como ahora, hay que recalentar los motores, no puedo dejar de recomendar la tienda especializada más querida de mi barrio.
Vinoteca Terra
Porque quien conoce a Xavi sabe el amor que tiene por los vinos y la pasión que pone en todo lo que hace. Comprar en la Vinoteca Tierra puede ser una experiencia, principalmente si hablas con él y te cuenta sobre todas su aventuras en la Borgoña, como ha hecho para conseguir cada uno de los vinos que tiene en su portfolio.
Pero si quieres tener una experiencia más singular sugiero que comas o cenes en uno de sus restaurantes: Matritum, la Gastroteca de Santiago y el resturante que está en el mercado de La Paz. Sigo pensando en el gazpacho de cerezas que me han servido allí.
Saisho
Porque si te gusta el Sake, y la comida japonesa tradicional no puedo dejar de recomendar el restaurante de mi amiga Natalia. Conocí a Natalia en la Cámara del Comercio cuando su restaurante era apenas un proyecto. Sabíamos acerca de su pasión por la comida japonesa y como quería montar el sitio. Sin duda Saisho fue un sueño hecho realidad. Estuve en la inauguración y desde entonces su éxito fue solo creciendo.
Como vengo de un país donde hay la mayor inmigración japonesa del mundo, no puedo dejar de recomendar este restaurante. Me recuerdo cuando llegue a España y no era capaz de encontrar restaurante japoneses auténticos, con una cocina que fuera más allá del sushi y sashimi. Hoy puedo decir que seguramente Saisho é uno de ellos. Estamos hablando de un restaurante con una identidad única, en el centro de Madrid que trata de rescatar lo mejor del país nipón.
Vinalogando por fases
Porque el desconfinamiento viene por fases… pero también con mucha calma y resiliencia. Asimismo este post es una forma de dar a conocer estos pequeños emprendedores, sus proyectos, pasiones y como conocerlos. Quizás cuando pase todo estos nos encontramos en algún de estos sitios para vinalogar un poco.
¡Chinchín!