Hoy celebramos cultura, tradición, historia y vida. Hoy celebramos el Día del Idioma Español y, aquí en España, el Día del Libro. Ese maravilloso elemento que como el vino, nos permite viajar y nos abre una ventana a la historia y al porvenir.
Seguimos confinados, moviéndonos lo justito para sobrellevar esta nueva rutina impuesta, aunque afortunadamente, nos quedan los libros, los vinos, la familia, los amigos, …
Tiremos entonces de material, o en todo caso, aprovisionémonos y viajemos a través de las historias escondidas tras las páginas de un libro y en las gotas de esta majestuosa bebida llamada vino.
Hoy es un día para apoyar la cultura, el desarrollo y el uso del español y te propongo hacerlo con vinos del país de Cervantes, de Valle-Inclán, Unamuno y García Lorca.
Ahora cuando empieza a aplanarse la curva pandémica, que avistamos la luz al final del túnel en materia sanitaria, nos ataca con más fuerza la incertidumbre económica.
Es momento, entonces para que todos aquellos, que vibramos en ondas sonoras impregnadas de taninos y aromas del campo, apoyemos a los más necesitados.
Momento para beber de pequeños viticultores, de proyectos atractivos y versátiles que ahora encuentran mayor pendiente en el camino a causa del covid-19 y los efectos de su gestión e incidencia en la economía.
¡Porque el tamaño importa!
No son solo los pequeños viticultores, también son los distribuidores, tiendas especializadas de pequeño tamaño sin plataforma e-commerce consolidada, quienes se ven a gatas para llegar al consumidor.
Y si alguna vez hemos dudado de si el tamaño importa, sí, ahora importa. Ahora cuenta la capacidad financiera y el flujo de caja de las empresas para hacer frente a la ralentización y a la inercia contenida del comercio y de la vida social.
Así que, a propósito de este día, celebrado también de manera atípica, -¡por fuerza mayor!- Sin lecturas del quijote, sin tertulias, sin firmas de libros, sin lo habitual; vamos a celebrar desde casa, libro en mano y copa arriba para elogiar nuestro idioma.
Maridaje: vino + libro
El Día del Libro es una fiesta cuyos orígenes se remontan al siglo XV (celebración del Sant Jordi en Cataluña), cuando el escritor valenciano Vicent Clavel Andrés, asentado en la ciudad condal, propuso la celebración a la Cámara Oficial del Libro de Barcelona.
Con posterioridad a sus primeros años de celebración -en 1930-, se estableció en la efeméride de la muerte de Miguel de Cervantes, que por una negra casualidad coincide con la de otros grandes de la literatura como Shakespeare, Josep Pla y Garcilaso Inca.
En conmemoración por el Día del Libro y su origen, mi primera propuesta es beber un vino de una variedad mediterránea, de origen español y por la que ya he mostrado una ferviente pasión: la garnacha.
Para realzar la gran pasión que nos mueve en Vinálogos, tomemos como punto de partida de este gran día, los viñedos catalanes, de clima mediterráneo, que acunan y exaltan la garnacha.
Bebamos Montsant
Viticultura orgánica, libre de herbicidas; viticultura que vuelve al origen, que se solidifica sobre la tradición y busca contar historias y conectar al hombre con la tierra.
A falta de viajes, de tener la posibilidad de visitar la bodega catando vinos con vista panorámica a la sierra del Montsant, catemos su geografía en versión líquida.
Mi primer vino recomendado es La Florens 2017, un vino que rinde tributo a la madre de Josep Grau, viticultor y artífice de esta propuesta enológica marsanense.
Resultado de viñas de entre 40 y 100 años, sitas en el municipio de Marçà, en la comarca del Priorat, provincia de Tarragona.
“Hacer vino es la más bella forma de conectar al hombre con la tierra. El hombre bebe su esencia y, al beberlo, el vino abre sus emociones y le contagia de placer: es druídico el vino”
Josep Grau
La florens, DO Montsant
Cultivado en ecológico, vendimia manual, levaduras indígenas y crianza en foudres de 2500 litros de capacidad, durante 14 meses.
Garnacha tinta que expresa la composición arcillosa del terreno de donde proviene, con notas de especias; con un carácter goloso en boca, de fruta negra madura que induce voluptuosidad.
En boca, gota a gota, bebemos carácter, grosellas y cerezas negras maduras, especias dulces, una tanicidad potente que se irá domando poco a poco, y buena acidez.
La vida no da espera, la vida hay que disfrutara y vivirla sorbo a sorbo: con lo que trae, con su azar y su ritmo, a veces parsimonioso, a veces presuroso.
Así que, aunque esta garnacha se puede beber con posterioridad, mi invitación es a abrirla hoy, beberla y disfrutarla, ¡puedo dar fe de ello!
Vinálogos: libro + vino
Una historia de España, de Arturo Pérez-Reverte. Noventa y un capítulos que repasan la historia de España desde la mirada del escritor, con su tono característico, que nunca nos deja indiferentes.
“La libertad es una librería”
Joan Margarit
El Español: lengua rica y multicultural. España: tierra de viña diversa
El Español es una lengua rica, diversa, multicultural, hablada en todos los continentes, oficial en América central y sur, en Europa y en África.
España, es tierra de viñas, líder mundial en tierra cultivada de viña, polifacética y diversa. Privilegiada con todos los climas posibles a lo largo de su geografía vinícola nacional e insular.
Del clima mediterráneo, por el cual es mayormente conocida, pasamos al clima atlántico. Viajamos hasta las viñas al noroeste del país, en la Ribeira Sacra.
Desde Monforte de Lemos nos adentramos en un proyecto que nació de un deseo por trabajar la tierra de manera artesanal y natural.
Sílice viticultores, Ribeira Sacra
Una bodega que desde un principio se proyectó lejana a la DO, más que nada por cuestión de coherencia en su filosofía de culto hacia la viña.
Recuperación de variedades como la branco lexítimo, que a día de hoy tiene su núcleo fuerte en la IGP Vino de la Tierra de Betanzos de donde es autóctona.
Trabajo casi artesanal, sin químicos ni herbicidas, sin levaduras añadidas, con bajos niveles de sulfuroso.
Primera bodega en vendimiar en la zona. Suelos graníticos con cierto aporte mineral, acuciado por la presencia de suelos de pizarras.
Con la particularidad de prácticas que no se acompasan con la DO, como la mezcla de uvas blancas con tintas y que no se hacen correcciones de acidez.
Me remito a García Márquez que decía: “escribo todos los días para mantener el brazo caliente”, así que te invito a leer cada día para mantener la mente despierta.
Catar cada día -si es posible- para mantener el olfato a punto y la muñeca fina.
Maridaje: vino + libro
Sílice tinto y Dolores Redondo, con Todo esto te daré. Un vino fruto de viñedos en el cañón del Sil, con crianza de 9 meses sobre lías en foudres de madera usada de 5200 litros, inox y hormigón.
Un vino de mezcla de las variedades Mencía -80%-, albarello -18%-, garnacha tintorera, merenzao y 2% de uva blanca de la región.
Maridamos un vino de un pequeño proyecto con gran entusiasmo, que huele a Ribeira Sacra, a sotobosque y a frutas rojas; lo maridamos con este libro de Dolores Redondo, que se desarrolla en la misma región.
Historia de suspense, emoción, amor e inevitables entresijos para matizar con un vino fresco y amable en nariz y en boca.
¡Feliz Día del Idioma!, ¡feliz Día del Libro!
La lectura, como otras cosas, nos ayuda a generar paz mental, crucial hoy en día para reconstruirnos y afrontar los retos que nos trae el covid-19, la naturaleza de donde vienen nuestros vinos nos recuerda, que de una forma u otra, pasaremos este trago amargo.
¡Salud!